asistí al homenaje a monier en el centro provincial de comunicación para la cultura en guantánamo; por supuesto, considero que mayores son los merecimientos del reconocido que la propia celebración que se le dedicó…
con muchas primeras veces en la música coral e instrumental en cuba y trascendiendo sus fronteras, talento frutecido de su tradición familiar y del sistema nacional de enseñanza artística, la vida de modesto conrado enseña que, para que su obra sea tomada en cuenta, al talento no le es imprescindible residir en los centros capitalinos, ni esperar a la improbable justicia de la veteranía o postmortem…
desde la remota y asincopadamente provinciana ciudad de guantánamo, como el poeta célebre que talló su diamante en la parquedad catalana de sus calles rectas, este instrumentista, arreglista y compositor no precisó, como han hecho y siguen haciendo o intentando muchos con más disposición a la queja y astucia que dones, emigrar a la capital para sobresalir en su arte…
desde su terruño natal, a casi mil kilómetros de La Habana, con la riente sencillez que le faltaba al poeta célebre, él pule su arte en el esconce del taller local como quien talla a solas su diamante, y ha logrado hacer trascender su brillo sonoro más allá de fronteras locales, nacionales e internacionales…
son cada vez más los coros en cualquier lugar del mundo que habla nuestra lengua, y se respetan, que incrementan esta atención reverente con las versiones de monier; por sus arreglos el papa visitante escuchó la cubanía en la música litúrgica de las misas que ofició; se escuchó por primera vez en español con coros y bandas, de una punta a otra de la isla rebelde contra el imperio, el clamor por la libertad ya conquistada de sus hijos presos, en la versión de Tie A Yellow Ribbon Round The Old Oak Tree, y en general, se encarga de vestir de largo la música popular en muchas ocasiones especiales; los jóvenes de las nuevas bandas que ayudó a formar agradecen sus versiones de canciones de la trova, y otras muchas que se espera no se acaben de contar…
el músico arreglista y director de muchas orquestas, no sólo de su banda sugerencia, lo es más que este saxofonista de pequeña estatura que se hace perdonar con la diligencia de sus partituras las asechanzas de un corazón mal hecho y maltrecho, y otras infelices ocurrencias, para seguir esplendiendo como el maestro que es y como tal llamado por sus contemporáneos, coetáneos, compatriotas y cómplices que celebramos sus 60 años de vida…
Al Maestro Conrado Monier Ribeaux estuvo dedicado el pasado 19 de Febrero del 2015 el Espacio Fijo “Te presento a” que auspicia el Centro de Comunicación para la Cultura en esta ciudad de Guantánamo, oportunidad que sirvió para rendir un doble homenaje: el próximo cumpleaños 60 del homenajeado y el natalicio 95 de Conrado Pedro Monier Chivás (“Tito Monier”) su padre. El momento sirvió de pretexto para reunir a amigos, familiares, alumnos aydmiradores con este importante, singular y carismático músico guantanamero.
Ángel Carpio, viejo amigo de Monier y especialista del Centro, dio inicio al espacio estrenando el audiovisual “Monier: la vida misma” donde en solo 16 minutos y 32 segundos recoge importantes testimonios, anécdotas y confesiones de familiares, amigos, de su cardióloga la Dra Varinia Montero Vega, de su esposa y del propio Monier, logrando ilustrar desde sus vivencias, momentos poco conocidos u olvidados acerca de la familia, vida, obra y sueños del mismo. Otro emocionante y ameno momento continuó en voz del propio Monier quien confesara su orgullo por haber tenido a unos padres excepcionales, una vida plena con alegrías y sinsabores, de su suerte por haber encontrado en su actual esposa fuerzas y la razón para seguir luchando a “pesar de estar mal hecho” dijo entre risas haciendo referencia a la malformación cardíaca congénita descubierta a raíz del infarto del miocardio que sufriera en Mayo del año 2013.
Otras voces se levantaron de manera espontánea: su hermana Mery, quien agradeciera en nombre de la familia este sencillo pero sincero homenaje a su amado hermano Conrado, que sentía extensivo a sus padres y hermano fallecidos y a la familia en general. Le siguieron su incondicional amigo y compañero Jesús Fernández quien junto su fabulosa agrupación “Amanecer” amenizara la tarde-noche, su esposa Carmen, un primo Monier (del cual penosamente no logro recordar su nombre) quien reconoció en público y por vez primera la gran influencia que desde muy pequeño ejerciera sobre él Tito Monier, Conradito y la familia Monier en su vocación musical y desempeño actual como Luthier, de Yusmani ex – alumno y director de la Banda de Concierto de Caimanera, de las profesoras Náyade y Suleika de la Escuela de Arte, de los alumnos de Violín que interpretaron un arreglo hacho por Monier para ellos; Gustavo, otro viejo amigo que junto a Carpio formó parte del grupo de Ángel Savón, músico guantanamero fallecido hace algunos años con quien compartieran momentos musicales trascendentales para el desarrollo futuro de él como arreglista y orquestador. Resultó muy acogida también por los participantes la intervención del ingeniero y actor humorístico Alexis Ayala (integrante del Komotú) quien quiso saber cómo fue ese importante arreglista y músico en las demás materias de su formación general y al que Monier confiesa su pasión por la obra de Nicolás Guillén de quien se declara un estudioso, sus facilidades para la Matemática, la necesidad de conocer de Geografía, Historia y otras materias de la formación general para poder desempeñarse eficazmente un músico así como su incursión en el estudio de la obra de Regino E. Boti que resultara un reto para él, todo ello para lograr en sus orquestaciones y arreglos corales la exquisitez.
Sin darnos cuenta y disfrutando de un rico vino de uvas, de un cafecito, entre risas, jaranas, confesiones y hasta de un ocasional dúo entre “El mocho” (vocalista de “Amanecer”) y Monier del bello bolero “Mucho Corazón” llegó el momento más formal donde se hizo una reseña de la trayectoria creadora y de sus aportes a la música guantanamera y cubana, en especial a la música coral, de la cual es considerado renovador y paradigma en Cuba y el mundo en voz de José Cuenca, investigador y Director del Centro de Información y Documentación musical “Rafael Inciarte Brioso” quien también hizo llegar un certificado a nombre del Centro Provincial de la Música “Luis Martínez Griñán” y a modo de conclusión el Centro de la Comunicación y el Sectorial Provincial de Cultura agasajaron a Monier con un Reconocimiento Especial plasmado en la obra “Sueños de luna” del artista plástico Santiago Fernando Pérez Díaz y una flamante cafetera para que el maestro Conrado Monier “continúe colando esos cafés express” que lo hacen aún más popular y un excelente anfitrión para quienes le visitan en su hogar.